Siempre vuelvo aquí para mi estancia en La Réole. La primera vez, el personal me dio recomendaciones de restaurantes. El Wi-Fi, la lavadora, la cocina compartida, y la sala de estar son ideales. Volveré para Pascua.

Increíble! Este lugar es alucinante, una joya oculta en el corazón histórico de un encantador pueblo francés. Las habitaciones, la cocina y las áreas comunes son acogedoras, limpias y muy bien diseñadas. El host es excepcional, y el desayuno delicioso. ¡Una experiencia inolvidable!

Amañi es un tesoro, un edificio increíblemente renovado del Medioevo en el centro histórico de un pueblo francés. Aunque inicialmente tuvimos reservas sobre compartir dormitorios, resultó ser una experiencia increíble. El hostal está impecablemente limpio, recientemente renovado y muy acogedor, con una cocina totalmente equipada donde los huéspedes pueden preparar sus propias comidas. Además, el desayuno francés que sirven es delicioso, con una variedad inmejorable de mermeladas caseras. está en una ubicación perfecta para hacer una parada en este pueblo típicamente francés.

Nada que decir. 😊

Mi propósito de viaje fue explorar la historia de La Reole y me quedé en Amañi Hostel por dos noches. El edificio es impresionante, magníficamente renovado y situado en el centro histórico. Las habitaciones compartidas resultaron ser una experiencia increíble. Las instalaciones y las habitaciones estaban impecables, gracias a la reciente renovación. El amplio y acogedor salón comedor con cocina totalmente equipada es perfecto para socializar. Tuve la suerte de que dos ciclistas hispanohablantes prepararon una cena para todos los huéspedes y fue una experiencia maravillosa. Además, el desayuno francés en la mañana incluía una selección increíble de mermeladas caseras.

Insisto, este lugar es super recomendado.

Qué lugar más bonito! Me sorprendió gratamente al llegar al hostel, es un edificio antiguo renovado con mucho estilo. Además, está en el centro histórico de un encantador pueblito francés. Me sentí como en casa, el ambiente era acogedor y todos los espacios estaban impecables. Lo mejor de todo es que el dueño, Julien, es una persona estupenda y realmente se preocupa por sus huéspedes. Otra ventaja genial es que la cocina está completamente equipada y hay ingredientes disponibles para preparar tu propia comida. tuve la suerte de compartir una cena con otros huéspedes, ¡fue una experiencia muy agradable!

Tengo que mencionar algunos inconvenientes. En primer lugar, el estacionamiento fue un problema.

Nos encantó nuestra estancia en este hostal en La Réole. La ubicación es perfecta en un encantador pueblo francés y el alojamiento era básico pero limpio y bien presentado. El anfitrión fue muy amable y nos dio una cálida bienvenida. El desayuno era sencillo pero delicioso, con una buena selección de pan y croissants, y té y café recién hechos. Además, el centro del pueblo está a solo 5 minutos a pie y cuenta con tiendas, bares y un restaurante muy bien de precio en la plaza principal. Definitivamente, recomendaríamos este lugar como una parada ideal en Francia.

No hubo nada que no nos gustara.

La ubicación del hotel es perfecta, ya que se encuentra en el centro de un hermoso pueblo con tiendas y bares. Además, está a solo 5 minutos a pie de una plaza encantadora, donde se encuentra un restaurante con precios muy razonables. También ofrece un desayuno básico pero satisfactorio, con una selección de pan y croissants recién horneados.

Hubo algunas dificultades para encontrar estacionamiento cerca del hotel, lo que generó cierta incomodidad.

El hostal es limpio y acogedor. La cocina está bien equipada.El desayuno tiene buenas opciones.Buena ubicación en el centro histórico.

Na.

El hostal es super limpio, recientemente renovado, acogedor y bien diseñado. La sala grande de cocina, comedor, sala de estar y televisión es cómoda y agradable. La cocina está completamente equipada y tiene ingredientes para preparar tus propias comidas. El desayuno francés es delicioso, con una variedad increíble de mermeladas.

Me sentí bastante seguro, no me puedo quejar.